Se estima que nuestro planeta sufre el impacto de 17.000 meteoritos al año. Gran parte del material extraterrestre que llega a la Tierra es en forma de polvo o en partículas de poco volumen. Normalmente pesan desde 50 gramos a 10 kilos y los más grandes son poco frecuentes, según afirman los expertos.
Hasta mediados de los años 40, estos hallazgos solo se podían ver en museos y universidades. Sin embargo, en 1946, Harvey H. empezó a vender estos increíbles objetos al público. Conocer el valor de un meteorito es una tarea muy compleja para cualquier tasador, ya que no existe un amplio mercado.
A diferencia de los asteroides más caros del Universo, cualquiera puede llegar a tener en su casa un fragmento (pequeño) de meteorito ya que estos son asteroides que se desintegran en nuestra atmósfera y llegan a la superficie terrestre. Como veremos a continuación en nuestro análisis de productos, el precio dependerá de diversos factores por los que algunos han llegado a convertirse en los meteoritos más caros vendidos en subastas.
Históricamente, el valor de los meteoritos siempre se estableció en gramos. Mientras más pesados, más caros. Sin embargo, recientemente, los coleccionistas han empezado a considerar tanto los aspectos estéticos como históricos. Y se utilizan las 4 S: Size (tamaño), Shape (forma), Science (ciencia), Story (historia).
10. Meteorito Gibeon mini: más de 60.000€
En febrero de 2021 se celebró una subasta en línea privada llamada Deep Impact: Martial, Lunar and Other Rare Meteorites, en la que se pusieron a la venta meteoritos excepcionales y piedras provenientes de la Luna y de Marte.
Entre ellos se encontraba el meteorito Gibeon de 53 kilos de peso. Se cree que se originó hace 4.500 millones de años en el núcleo fundido de un asteroide localizado entre Marte y Júpiter. Impactó con otro asteroide y acabó en el desierto de Kalahari de Namibia, donde fue encontrado con la ayuda de detectores de metales. Pese a ser casi tres veces más pequeño que su hermano mayor (descrito a continuación), tiene una singular forma que lo convierte en una pieza extraordinaria. Su precio mínimo de salida fue de 70.000 dólares, y un precio máximo de 100.000.
9. El meteorito Gibeon: 280.000 €
Alcanzó la Tierra en épocas prehistóricas y fue descubierto en 1836 en Namibia, al borde del desierto de Kalahari, en el sur de África. Este gigantesco meteorito metálico de 140 kilos de peso no es un ejemplar común. Está compuesto mayoritariamente de hierro y níquel, así como aleaciones metálicas que contienen cantidades significativas de cobalto y fósforo.
Se dice que esta roca espacial tiene un parecido al famoso cuadro de El Grito, de Edvard Munch.

8. Meteorito lunar Dar al Gani 1058: 281.000€
El meteorito lunar más grande que jamás se ha puesto a subasta, ya que las rocas recogidas por los astronautas del Apolo nunca fueron puestas a la venta. Pesa 1,81kg. y de el se sabe que se formó en las tierras altas de la Luna, en el lado más lejano a la Tierra. La oferta inicial de la roca fue de unos 130.000 euros y la subasta terminó en 281.000 euros.
Los impactos de los meteoritos sobre la luna expulsan material en el espacio, que a veces puede terminar en la Tierra. Por supuesto, las rocas lunares también han llegado a la Tierrra a través de misiones espaciales, pero este meteorito en cuestión cayó a la Tierra por sí mismo. Sin embargo, los científicos no han podido descubrir cuándo exactamente. Se encontró en Libia en 1998.

7. El meteorito Chelyabinsk: 336.000€
El 15 de febrero de 2013 el mundo estaba pendiente de la aproximación a la Tierra del asteroide (367943) Duende, pero de repente un superbólido de 19 metros de diámetro cruzó la atmósfera y cayó cerca de la ciudad rusa de Chelyabinsk. Es el único meteorito que, hasta la actualidad, ha causado daños tanto en edificios, como heridas leves a casi 1.500 personas.
Unos 5.000 kilogramos de fragmentos de meteoritos alcanzaron el suelo, incluido el de 650 kg que se recuperó en el lago Chebarkul. La historia que se esconde detrás de un meteorito como este también es importante a la hora de calcular su valor de mercado. Un meteorito cuya caída sobre la Tierra fue contemplada por testigos puede alcanzar un precio más alto. En este caso, las circunstancias de la caída han garantizado que sus fragmentos alcancen valores más importantes.

6. El meteorito marciano Zagami: más de 360.000€
En 1962 un granjero de Zagami, en Nigeria, casi fue golpeado por este gran meteorito cuando cayó. En los años 90, la NASA descubrió que las muestras de gas obtenidas en este meteorito coinciden con la composición de la atmósfera de Marte. Pero no es solo una roca de la superficie de ese planeta. Zagami es volcánica, un basalto marciano que cristalizó hace 175 millones de años y fue expulsado del planeta hace 3 millones de años, tras el impacto de un gran asteroide. Por ello, está considerado hasta la fecha como el meteorito de Marte más grande descubierto sobre la Tierra.
Un fragmento de su masa de 151 x 73 x 106 mm y 1.382 kg de su masa se vendió en una subasta en Londres por más de 278.000€.

5. El meteorito Springwater: 511.000€
Este meteorito palasito de 53 kg. fue descubierto en una granja de Saskatchewan, en Canadá, en 1931. Se cree que tiene 4,5 mil millones de años de antigüedad y que tiene una gran cantidad de mineral olivino. Cuando se corta y se pule, los bellos cristales olivinos pueden verse claramente. Esto hace que los meteoritos palasitos sean muy deseables a ojos de los coleccionistas. Lo compró el Royal Ontario Museum de Toronto por 511.000 €.

4. El meteorito Conception Junction: 724.000€
Descubierto en 2006 por un granjero en Conception Junction, Missouri, la Universidad de St. Louis identificó esta roca espacial como palasito. También cuenta con cristales olivinos en su interior, esparcidos por su superficie compuesta de hierro y níquel. Además, los investigadores creen que en algún momento este meteorito formó parte de un asteroide que orbitaba entre Marte y Júpiter.

3. El meteorito Willamette: 851.000€
En octubre de 2007, el American Museum of Natural History donó este fragmento de meteorito, valorado en millones de euros, y se puso a la venta en Nueva York.
Fue descubierto en Oregón en 1902 y pesaba más de 16 toneladas cuando lo encontraron. Está considerado como el meteorito metálico más grande que se ha encontrado en ese país, y el sexto mayor del mundo. Lo curioso es que en el lugar del descubrimiento no hay restos de ningún cráter de impacto.

2. El meteorito Brenham: más de 896.000€
Fue el Lote 74 de la subasta Meteoritos de Christie’s en Londres, en el año 2016. Se trata del meteorito orientado más grande del mundo con piedras preciosas extraterrestres (olivina y peridoto). Pesa 650 kilos y fue descubierto en 2005 en el condado de Kiowa, Kansas, con la ayuda de un detector de metales.
Según el Museo de Historia Natural de Nueva York, habría formado parte del gran meteorito Brenham, que explotó hace siglos sobre lo que ahora es Kansas, esparciendo más de tres toneladas de fragmentos.
Se clasifica en la categoría de los palasitos (menos del 0,2% de los meteoritos), aunque su verdadero valor se encuentra en que se trata de un meteorito orientado, algo inusual. Lo habitual es que los meteoritos suelan tambalearse cuando entran en la atmósfera terrestre, pero este no cambió su eje vertical.

1. El meteorito Fukang: 1,7 millones de euros
Fue descubierto en el desierto del Gobi, cerca de Fukang, una ciudad situada en la región noroccidental de Xinjiang, China, en el año 2000. Pesaba más de una tonelada (1.003 kg) y se identificó como un palasito, compuesto por metales y silicatos. Al cortarlo, dentro de la roca se encontraron cristales dorados translúcidos de olivino, los cuales brillaban mezclados entre los reflejos plateados de una matriz de níquel-hierro, formando una crisol de gran belleza.
El meteorito, de gran valor, se ha ido dividiendo en trozos, algunos parecen vitrales cuando el sol brilla a través de ellos. Los fragmentos del meteorito se cotizan entre 40 y 60 dólares/gramo. Un coleccionista anónimo posee el trozo más grande, que pesa 420 kg. por el que pagó 1,7 millones de euros.

Los meteoritos son hallazgos realmente valiosos, ya que estas rocas se están volviendo más caras que el oro, y no se ven cada día.