No vamos a definir el marketing, puesto que ya existen diversas definiciones planteadas por diferentes organizaciones y autores de renombrada autoridad, entre las que podemos nombrar a la Asociación Americana de Marketing y a Philip Kotler, entre otros.
Sin embargo, escribir sobre marketing es algo complicado, cabe mencionar lo que señala Carasila y Miltón (2008), «comprender el concepto de marketing es una cosa, ponerlo en práctica es otra cosa» y precisamente sobre esto queremos resaltar algunos detalles de importancia sobre el marketing.
En la década del 1900-1910 el marketing estaba dirigido a todas aquellas actividades que debía realizar el productor para colocar su producto al mercado de consumo, es decir, al consumidor, desde el momento que el producto salía de la fábrica.
Para ese entonces la preocupación central era cómo colocar los productos en las manos de los consumidores, el marketing estaba orientado hacia la producción y no a las ventas como hoy en día.
Actualmente el objetivo principal de las empresas es el de maximizar las ventas a través de una campaña de marketing, y muchas no se preocupan por aspectos claves como el valor agregado y la relación con los clientes.
Con la evolución de la tecnología y la salida al mercado del Internet hablamos del marketing digital y donde el alcance de los productos y servicios es exponencial, más que exponencial es global, puesto que, a través de la digitalización de las empresas y de las redes sociales, lo que produce y ofrece una empresa tiene un alcance global.
Este alcance global tiene como aspecto particular lograr tener una gran audiencia de diferentes estratos sociales como de diferentes países, lo que a primera vista se puede ver como posibles clientes potenciales, y por ende un incremento importante de las ventas en los productos y servicios ofrecidos.
No hay duda, que el alcance que tienen las empresas bien sea privadas o públicas, organizaciones, gobiernos a más mercados y a personas a través de la digitalización y las redes sociales es impresionante, y generan una gran audiencia que muy posiblemente pueden convertirse en clientes, pero, ¿esa es la realidad?.
La gran pregunta que deben hacerse los responsables del marketing, es la siguiente, de toda esa gran audiencia que tiene determinada empresa, ¿Cuántos y cuáles clientes están dispuestos a comprar o adquirir nuestros productos y/o servicios?
Sabemos que, con la invención del Internet, muchas empresas tienen la oportunidad de ofrecer sus productos y servicios en la red y logran captar grandes cantidades de personas con lo que ofrecen, pero a la final no necesariamente se convierten en ventas, y lo que debe preocuparnos es cómo hacer para conectar y llegar a las personas adecuadas, que realmente compren lo que las empresas ofrecen.
Precisamente no se trata de tener miles de suscriptores en la lista, se trata de llegar a las personas adecuadas, que realmente adquieran nuestros productos y servicios, y es aquí donde debe centrarse el marketing.
¿Qué estrategia utilizar para llegar a ese mercado meta que realmente esté interesado y compre lo que las empresas ofrecen?
Es importante acotar, que el marketing no solo trata de dar a conocer a las empresas, y los productos y servicios que ofrecen, se trata de agregar valor para los clientes, habilidades de comunicación y de relaciones entre las partes, lo que puede hacer que los clientes compren, sin embargo, muchos clientes tienen toda la información a la mano, y no compran.
Aunque se pueden generar opiniones encontradas, agregar valor es muy importante, pero además de este aspecto uno de los aspectos fundamentales para una campaña de marketing efectiva y eficaz, que logre los objetivos de la empresas, son las habilidades en comunicación que se tienen, además de los beneficios que pueden tener los productos y servicios ofrecidos para los clientes, es decir, es necesario y fundamental que los clientes vean resultados verdaderos y concretos que satisfagan su necesidad o resuelvan sus problemas.
Artículo original creado por Reinaldo Briceño de Causa Solidaria
