Gina Rinehart, una empresaria y magnate minera australiana, se destaca como la persona más rica de Australia y una de las mayores propietarias de tierras del mundo. Rinehart ha adquirido una extensa propiedad en Australia, con un impresionante total de 23,969,000 acres de terreno o lo que es lo mismo 9,693,907 hectáreas o en la medida universal para estos casos, dentro de esa extensión cabrían 15,146,235 campos de fútbol o casi la extensión de un país tan grande como Islandia.
Gina Rinehart es conocida por su éxito en el sector minero, donde ha forjado su fortuna y donde otras grandes ballenas están invirtiendo, sobre todo ante la próxima escasez de metales o la creciente demanda de metales específicos para la tecnología. Como presidenta de Hancock Prospecting, una empresa fundada por su padre, Rinehart ha llevado la compañía a nuevos niveles de prosperidad y expansión. Su enfoque en la minería ha sido clave para su crecimiento y su ascenso a la cima de la lista de las personas más ricas de Australia.
La propiedad de tierras de Gina Rinehart la sitúa entre algunos de los propietarios más notables del mundo. Aunque está detrás de propiedades de la Corona, como las del Rey Carlos III, la Iglesia Católica o el pueblo Inuit, su vasto territorio supera a muchas otras propiedades en tamaño y extensión, Madison Trust publicó una infografía comparando los grandes tenedores de tierras de todo el mundo, donde queda destacado el lugar que ocupa una de las mujeres más ricas del mundo.

Implicaciones económicas y oportunidades: La inmensa propiedad de Gina Rinehart no solo representa su riqueza personal, sino que también tiene implicaciones económicas significativas. Su control sobre vastas extensiones de tierra ofrece oportunidades para la inversión, el desarrollo y la explotación de recursos naturales. Además, su influencia y experiencia en la industria minera le otorgan un papel destacado en la economía australiana y la economía global.